Prevalencia del déficit de biotinidasa en función de la zona geográfica
La prevalencia de la enfermedad se estima con lo siguiente:
- 1 / 140 000 para una carencia profunda de biotinidasa
- 1 / 110 000 para un déficit parcial de biotinidasa
- 1 / 60 000 para la prevalencia combinada de carencias profundas y parciales
La prevalencia es generalmente más elevada en las poblaciones que presentan un alto índice de consanguinidad (es decir, Turquía, Arabia Saudita) o en la población hispana. Sin embargo, parece ser más baja en la población afroamericana.
Aspectos clínicos
La biotina (también llamada vitamina H o B8) es una vitamina esencial que pertenece al complejo vitamínico B. Es hidrosoluble y funciona como coenzima para cuatro carboxilasas, esenciales para el buen funcionamiento de la neoglucogénesis, de la síntesis de ácidos grasos y del catabolismo de diversos aminoácidos de cadena ramificada.
El déficit de biotinidasa es un defecto congénito del metabolismo del reciclaje de la biotina. Una carencia profunda de biotinidasa se define por una actividad residual <10 % de actividad media normal de la biotinidasa sérica, mientras que un déficit parcial se define por una actividad residual de entre el 10 % y el 30 % de la actividad media normal.
La deficiencia de biotinidasa en recién nacidos se presenta cuando desarrollan generalmente anomalías neurológicas graves, como, por ejemplo, convulsiones, hipotonía, ataxia, retraso psicomotor, atrofia óptica, sordera neurosensorial y trastornos cutáneos (es decir, alopecia, erupción cutánea, candidiasis). En el plano metabólico, es posible que se produzca una acidosis láctica con cetosis, una aciduria orgánica y una hiperamoniemia moderada. Más adelante, se desarrolla también una debilidad de los miembros motores y una paresia espástica. Los trastornos visuales, auditivos y neurológicos son generalmente irreversibles, incluso con tratamiento.
Los individuos que presentan una carencia parcial pueden padecer hipotonía, erupciones cutáneas y caída del cabello, especialmente en períodos de estrés (es decir, infección prolongada, etc.).
La enfermedad está causada por variantes patógenas del gen BTD. Estas mutaciones son responsables de la ausencia o reducción de la actividad de la biotinidasa.
Tratamiento
El tratamiento consta de una suplementación vitamínica cotidiana de biotina por vía oral. Este tratamiento es notablemente eficaz si se empieza desde una edad muy temprana. Previene todas las manifestaciones clínicas en los sujetos en quienes se detectó la enfermedad en el cribado neonatal y mejora el estado clínico de los pacientes sintomáticos. Ciertas afecciones, sin embargo, una vez que ocurren, son irreversibles incluso bajo tratamiento con biotina, como la atrofia óptica, la sordera o el retraso en el desarrollo.
La suplementación con biotina debe continuarse de por vida. Este tratamiento no tiene ningún efecto secundario conocido. No obstante, se recomienda hacer controles oftalmológicos, neurológicos y metabólicos periódicamente.
Herencia
El déficit de biotinidasa se hereda de manera autosómica recesiva.